Según el informe realizado por el Espacio de Economía Feminista de la Sociedad de Economía Crítica en 2018, “en la provincia de Mendoza, las tareas domésticas y de cuidados -aquellas actividades necesarias para la supervivencia cotidiana de las personas y el cuidado directo de niñas/os y adultos dependientes- recaen fuertemente sobre las mujeres.” Las mujeres realizan una doble jornada laboral y no se trata de horario cortado, o de dos trabajos como sucede en algunos casos también, sino al trabajo no remunerado y no reconocido por muchos, de tareas domésticas y de cuidado. Sumada en algunos casos a la jornada laboral en un mercado laboral. “Respecto a las tareas domésticas, como lavar y planchar la ropa, limpiar y ordenar la casa, preparar y cocinar alimentos, la responsabilidad recae sobre mujeres en el 90,2%, 87,8 % y 87% de los hogares respectivamente, según resultados de la Encuesta Condiciones de Vida para el año 2016 . En cuanto a las tareas de cuidado, la situación es similar: el cuidado de adultos dependientes, de enfermas/os y personas con discapacidad y de niños/as está a cargo de mujeres en el 73,1%, 74,6% y 88,9% de los hogares.”
Según la Encuesta de Condiciones de Vida para el año 2016, realizada por la DEIE (Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas), el 32% de los hogares en la provincia de Mendoza tiene a una mujer como jefa de hogar. Sin embargo, si analizamos los hogares monoparentales -es decir, familias constituidas por un solo cónyuge, padre o madre y con hijas/os- el 84,70% tiene como máxima responsable a la jefatura femenina.